Rebote del Pensamiento

Rebote del Pensamiento
0
(0)

El Experimento de Rebote del Pensamiento

La supresión del pensamiento parece tener los efectos opuestos, los pensamientos reprimidos resurgen y se manifiestan en forma de sueños. La investigación demostró que el intento de anular un pensamiento genera sobre el sujeto un rebote del pensamiento.

En los años 80, la Universidad de Harvard realizó un experimento para intentar descubrir los efectos de la supresión del pensamiento. El psicólogo social estadounidense Daniel Wegner dirigió el estudio.

Curiosamente, basó el experimento en una anécdota sobre un oso polar narrada por León Tolstoi a finales del siglo XIX. Tolstoy habló de tener que pasar un examen para poder compartir el rato con los amigos de su hermano mayor.

Le dijeron que tenía que sentarse en un rincón y que no podía moverse hasta que dejara de pensar en un oso polar. No pudo hacerlo, cuanto más trataba de reprimir sus pensamientos relacionados con el oso polar, más le venían a la mente la imagen.

El Experimento

El experimento de Wegner, inspirado en el oso polar, tuvo varias etapas. En la primera etapa, se les dijo a los sujetos de prueba que durante cinco minutos podían pensar en lo que quisieran, solo tenían una limitación: no podían pensar en un oso polar.

Los investigadores les indicaron que tocaran una campana si, durante ese tiempo, pensaban en un oso polar. Los participantes no pararon de tocar la campana durante los cinco minutos completos del experimento.

Tocaron la campana repetidamente en intervalos de menos de un minuto. Cuanto más trataban de no pensar en el oso polar, más difícil era sacárselo de la cabeza.

Te recomendamos que leas  El Experimento de Harlow

En la segunda fase, los investigadores pidieron a los participantes que escribieran sus pensamientos antes de irse a dormir. Le dijeron a la mitad del grupo que escribiera todos sus pensamientos, excepto aquellos que estaban relacionados con alguien que les gustaba o pensaban que era agradable.

Los investigadores les dieron instrucciones específicas para reprimir sus pensamientos sobre esa persona.

Le pidieron a la otra mitad del grupo que incluyera a esa persona en sus notas e incluso que escribiera sus iniciales. Luego, analizaron los sueños de los 295 estudiantes que participaron en el experimento.

Los sujetos que reprimieron, o intentaron reprimir, los pensamientos de su persona especial soñaban con esa persona el doble de veces que los sujetos que incluían a esa persona en sus pensamientos.

Conclusiones de la Investigación

Los resultados del experimento mostraron que la supresión del pensamiento, o más bien el intento de suprimir directamente los pensamientos, es contraproducente. Los pensamientos reprimidos vuelven a la mente, una y otra vez, tanto conscientemente como en sueños.

Los científicos llaman a este pensamiento rebote o memoria reprimida. Wegner lo llamó “control mental irónico”.

¿Cómo valoras este contenido?

¡Haz click en una estrella para calificarla!

Si te gustó este contenido...

¡Compartilo en redes sociales!

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *