En 1917 Wolfgang Köhler publicó un estudió en donde se afirmaba que el comportamiento animal no era solo instinto o condicionamiento. Köhler establece el concepto de aprendizaje por insight, o sea, por discernimiento repentino basado en una serie de estímulos.
Después de un poco de contemplación, Sultan juntó los dos palos y pudo alcanzar los plátanos. Esta acción fue producto de una reestructuración del campo perceptivo.

Te proponemos un interesante y divertido experimento en dónde deberás elegir el nombre de los juguetes que tu empresa estará sacando al mercado. Aunque no conozcas de marketing tendrás las responsabilidad de seleccionar los nombres adecuados para cada personaje.
La consultora determinó que los nuevos juguetes deberían llamarse “Takete” y “Baluba”. Tu tarea es asignarle el nombre a los juguetes que se muestran a continuación para comenzar a promocionarlos en el mercado.

El Efecto de las figuras Kiki y Bouba es un descubrimiento del psicólogo Wolfgang Köhler llevado a cabo en 1929 en la isla de Tenerife, España. Con este experimento se pudo comprobar que el nombre asignado a los objetos no es arbitrario.
Setenta años más tarde, en el 2001, los neurocientíficos Vilayanur Ramachandran y Edward Hubbar repitieron el experimento. Recuperaron las aportaciones de Köhler y modificaron el nombre de las figuras por Kiki y Bouba.